En la madrugada del 19 de Abril de 1961, las tropas cubanas
estaban situadas a pocos kilómetros de Playa Girón.
Desde varios puntos de la Ciénaga, a la orden de Fidel, avanzaban diversas unidades hacia el bastión
enemigo, para librar la batalla final. La aviación y la defensa antiaérea, reportaban también estar
lista para el combate.
Mientras tanto, las tropas al mando del capitán José Ramón
Fernández se dirigen desde Playa Larga a Girón, con varios tanques, morteros,
obuses 122 milímetros y SIETE baterías antiaéreas, que protegen el avance de tres batallones de
infantería, entre ellos, el de la Policía
Nacional Revolucionaria. La situación de los mercenarios es angustiosa:
A las CINCO de la mañana el jefe de la Brigada, transmite el
siguiente mensaje a Puerto Cabezas:
“Ustedes NO conocen cuán desesperada es nuestra situación: Necesitamos
de una fuerte protección aérea. Sin ella, NO sobrevivimos” ¿Nos van a ayudar o a dejar?
Alrededor del mediodía, el Puesto de Mando ubicado en el
Central Australia, recibe una buena noticia: Las tropas cubanas habían tomado
el importante poblado de San Blas y el enemigo se desplegaba hacia Girón.
Fidel ordena el traslado de los tanques a ese lugar y que
ataquen sobre las posiciones del enemigo. Por la tarde, el Comandante en Jefe
da a conocer el Comunicado número TRES:
“La participación
norteamericana en la agresión que se desarrolla contra Cuba, ha sido
dramáticamente comprobada en la mañana de hoy, al derribar nuestras baterías
antiaéreas un avión militar norteamericano, piloteado por un piloto
norteamericano, que bombardeaba la población civil y a nuestras fuerzas de
infantería, en la zona del central Australia.
“El piloto norteamericano agresor, cuyo cadáver se encuentra
en manos de las fuerzas revolucionarias, se llamaba LEO FRANCIS BERLISS
“Este es uno de los CUATRO aviones militares enemigos derribados
en la mañana de hoy, al alcanzar el total de NUEVE aparatos abatidos desde que
empezó por la península de Zapata el ataque de los mercenarios, cuya total
liquidación es ya cuestión de horas”.
“Estado Mayor
General de las Fuerzas Armadas Revolucionarias”
A media tarde, Fidel se traslada desde el Puesto de Mando a
la zona de operaciones y ordena a la
aviación y a la artillería terrestre,
realizar un fuerte ataque sobre Girón y el mar, para evitar que los
mercenarios se reembarquen.
Llega a San Blas y continúa hacia Helechal, a solo unos
CINCO kilómetros de Girón, acompañado del Presidente Dorticós. Poco después,
junto a la Segunda Compañía de tanques, el Comandante en Jefe, traza la estrategia
para asestar el golpe final.
Fidel sube a uno de
los tanques y dirige una arenga a los presentes. Entre otras cosas, les dice:
¡“Qué no se
detengan los tanques, hasta que las esteras se mojen con el agua de la playa,
porque cada minuto que esos mercenarios estén sobre nuestro suelo, entraña una
afrenta para nuestra patria”!
En ese momento, el objetivo era impedir que se
escaparan.
De inmediato, a bordo de uno de los tanques, ordena el
avance hacia el enemigo.
Pasadas las CINCO de la tarde, varias unidades del Ejército
Rebelde, la Policía Nacional Revolucionaria y las Milicias, entraban a Playa
Girón por diferentes puntos.
El enemigo, desmoralizado NO hacía la resistencia de los dos
primeros días. La mayoría intentaban regresar a sus embarcaciones. ¡Estaban
totalmente derrotados!.
Centenares de prisioneros y abundante pertrecho de guerra,
caían en manos de las fuerzas revolucionarias.
Fidel redacta el
Comunicado número CUATRO, dirigido al pueblo de Cuba.
“Fuerzas del
Ejército Rebelde y de las Milicias Nacionales Revolucionarias, tomaron por
asalto las últimas posiciones, que las fuerzas mercenarias invasoras habían
ocupado en el territorio nacional.
Playa Girón, que fue el último punto de los mercenarios,
cayó a las CINCO Y TREINTA de la tarde.
“La Revolución ha
salido victoriosa, aunque pagando un saldo elevado de vidas valiosas de
combatientes revolucionarios, que se enfrentaron a los invasores y los atacaron
incesantemente, sin un solo minuto de tregua, destruyendo así, en menos de 72
horas, el ejército que organizó durante muchos meses, el gobierno imperialista
de Estados Unidos. El enemigo ha sufrido una aplastante derrota. Una parte de
los mercenarios trató de reembarcarse al extranjero en diversas embarcaciones,
que fueron hundidas por la Fuerza Aérea Rebelde. El resto de las fuerzas mercenarias, después
de sufrir numerosas bajas de muertos y heridos, se dispersó completamente en
una región pantanosa, donde ninguno tiene escapatoria posible.
Fue ocupada gran cantidad
de armas de fabricación norteamericana, entre ellas varios tanques pesados
Sherman.
Todavía NO se ha hecho el recuento completo del material
bélico ocupado.
En las próximas horas el Gobierno Revolucionario brindará al
pueblo una información completa de todos los acontecimientos.
Fidel Castro Ruz,
Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, Abril 19 de 1961,
Año de la Educación”.
Por: Luís Manuel Quesada Kindelán