Las Tunas.- Los criterios tajantes que alguna vez vaticinaron el fin de la radio pasaron por alto la capacidad inigualable de "la wireles" para reinventarse y descubrir, coqueta, el camino hasta las audiencias más exigentes.
A sus tan conocidas ventajas de medio económico y sumamente
efectivo en situaciones de emergencia, suma la nada despreciable condición de
ser el de mayor audiencia. Por eso, llega virtuosa a este 13 de Febrero, la
fecha en que celebra su Día Mundial.
Este año el lema fundamental del convite ha sido "Radio
y Deporte". Y la combinación sigue en apuesta por la paz, el
fortalecimiento de la diversidad y el desarrollo sostenible de las naciones.
En Cuba cada quien le hace honores desde las
particularidades de los diferentes sitios. Algunos, bien escondidos en la
geografía bendita de este Archipiélago.
Las Tunas se suma de manera especial con la realización, a
partir de hoy y hasta el 17 de febrero, de la segunda edición del Festival
Online Ultrasonido. Un evento único de su tipo en el país, que tiene el
auspicio de la AHS y Radio Victoria.
Las jornadas prometen conferencias, talleres, intercambios
online entre creadores de toda Cuba y el debate acucioso de las obras en
competencia.
Temas como la narración y el comentario deportivo, la
salvaguarda del patrimonio sonoro, el prosumidor dentro del medio y la
evolución de la participación ciudadana dentro de la radio tunera, ocuparán de
manera especial la agenda.
A esto se suma la trasmisión en vivo, durante todos los días
del evento, de un programa a partir de
las 3:30pm por Radio Victoria. Dando voz a los creadores para que compartan sus
experiencias con los oyentes más fieles de la planta.
Para hoy reservan a partir de las 8:30 pm la inauguración de
la exposición Convergencias, de los artistas Yahiron Villalobo y Junior
Fernández, en la galería Guernica, de la Casa del Joven Creador.
La gala inaugural de la cita será a las 9:00 pm en la Plaza
Martiana con una invitación que para los apasionados tiene todo el sabor de la
certeza : "La radio eres tú".
Por Esther
De la Cruz Castillejo