Puerto Padre, Las Tunas.- El 24 de febrero de 1940 nació del ingenio creador de Pedro Zacca Cheda, comerciante libanés, CMKY Radio Puerto Padre. Esta emisora desde su salida al aire asentó raíces en el éter y atrapó la audiencia a través de Fiesta guajira, México canta, Discoteca popular y Variedades del domingo, espacios en principio con un marcado interés comercial y que perduran en la parrilla de la legendaria planta tunera.
Desde aquel entonces han transcurrido ocho décadas. Con el devenir de los años después del triunfo definitivo y la nacionalización fue bautizada como Radio Libertad. La programación consolidó otros intereses, más abarcadores.
Mucha historia hay en sus 16 lustros, nombres que trascienden en el tiempo como sus creadores, o los que luego llegaron como aprendices de la creación radiofónica y los que, hechizados por su magia, abrigan a nuevas generaciones dispuestas a preservar su sonido como patrimonio intangible del territorio.
Tanto es Radio Libertad para sus oyentes, que la sienten como el latido continuo de la localidad. Entre no pocos constituye el mismo corazón de la Villa Azul, en otros el completamiento de la espiritualidad, porque es esa armonía que alcanza la expresión más elevada del goce.
Y es que la emisora puertopadrense ha contado los más importantes acontecimientos económicos, políticos y sociales del municipio, la provincia, el país y el mundo. La innovación del obrero, el verbo sin par de la niñez, el hacer de hombres y mujeres comunes han llegado a todos a través de esta institución radial que surgió para ser de la gente.
Hoy, desde estudios improvisados, en la sede de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana, el colectivo de la añeja planta renueva y afianza su capacidad de servicio público y confirma del legado de Pedro Zacca Cheda que “siempre será un instrumento de comunicación, de llevar cultura y progreso a muchísimos pueblos”.
En Puerto Padre, donde salpican las olas del Atlántico; donde molinos, arte y belleza natural se mezclan con el hacer cotidiano, Radio Libertad, a sus 80 años, sigue siendo el sonido que identifica a su pueblo.
Por Rosa María Ramírez Reyes