Con profundo pesar, compartido por miles de colegas y
compatriotas en toda la isla y amigos de varias latitudes, la Presidencia de la
Unión de Periodistas de Cuba informa que a las cinco de la mañana de este
martes 15 de agosto, falleció en La
Habana, a la edad de 74 años y víctima de cáncer, nuestro querido compañero
Antonio Demetrio Moltó Martorell, quien desde el noveno Congreso, en julio de
2013, fue elegido presidente de la Upec.
Las honras fúnebres tendrán lugar mañana miércoles, a las
10:00 a.m. en la sede de la Upec, en 23 e I, Vedado.
Sus extraordinarias cualidades como ser humano, como
revolucionario y como profesional con más de cincuenta años de trabajo en el
periodismo le permitieron ganarse la
simpatía, el respeto y el cariño de sus colegas y el reconocimiento expresado
en galardones tan altos como el Premio Nacional de Periodismo “José Martí” por
la obra de la vida, el Premio Nacional de la Radio y la Réplica del Machete del Generalísimo
Máximo Gómez.
Nacido en Santiago de Cuba, de padres albañil y ama de casa,
desde muy joven Moltó comenzó a trabajar como ayudante de la construcción,
dependiente de comercio y en una fábrica textil, aplazando aspiraciones de
mayores estudios por el apremio de la economía familiar.
Antes del triunfo de la Revolución colabora con el
Movimiento 26 de Julio, participa en protestas y manifestaciones, asiste al
entierro del joven mártir Frank País García y toma parte en la huelga de abril de 1958. Luego del triunfo de enero de 1959, es
miembro fundador de la Asociación de Jóvenes Rebeldes y de otras organizaciones
como las Milicias Nacionales Revolucionarias, CTC y los Comités de Defensa de la Revolución.
En las Organizaciones Revolucionarias Integradas (ORI) ocupó
diferentes cargos en la base y al gestarse la creación de los Comités de
Defensa de la Revolución en Santiago de Cuba, pasó al trabajo profesional de la misma y llegó a
ser coordinador regional. También
respondió presente en importantes convocatorias de aquellos años como cuatro
zafras del pueblo, trabajos agrícolas, canje de la moneda, nacionalizaciones,
campañas de alfabetización y de vacunación antipoliomielítica, y situaciones de
alerta combativa cuando la agresión imperialista por Playa Girón, la Crisis de
Octubre, los cambios de gobiernos norteamericanos y otras.
En 1970 ingresó al Partido Comunista de Cuba por asamblea de
trabajadores ejemplares.
Con gran orgullo y gratitud por su tierra natal, Moltó
recibió la Llave de la Ciudad de Santiago de Cuba
Sus vínculos iniciales con la prensa revolucionaria tuvieron
lugar desde la labor del frente de propaganda en los CDR de la antigua
provincia de Oriente. En 1967 pasó a
trabajar en el entonces Instituto Cubano de Radiodifusión, como periodista,
jefe de cierre informativo y director del noticiero informativo de la emisora
CMKC, cadena provincial de Santiago de Cuba. También fue subdirector del ICR en
Oriente, director del noticiero de Tele Rebelde y de los servicios informativos
de la radio, hasta que en 1975 es promovido al organismo nacional, como
subdirector general y luego vicepresidente encargado de los informativos.
En el año de 1967 ingresa a la Unión de Periodistas de Cuba,
donde llegó a ocupar el cargo de secretario general de la delegación provincial
de Oriente Sur. Junto a compañeros del
periódico Sierra Maestra y de la Facultad de Humanidades trabajó en la
preparación y arrancada de los estudios de Periodismo en la Universidad de
Oriente, al tiempo que desde el ICR impulsaba la primera escuela provincial de
periodismo radial en aquel territorio.
También fue presidente provincial de la Upec en La Habana,
en tiempos en que se desempeñó como jefe de cierre informativo en el periódico
Tribuna de La Habana. Desde el III Congreso de la Upec integró el Secretariado
Nacional de la organización. En 1999 resultó elegido para integrar el equipo
profesionalizado de la Presidencia nacional de la Upec y fue encargado del
frente de superación y formación de periodistas. Posteriormente fue director
del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, hasta su elección como
Presidente de la Upec, en el 9no. Congreso efectuado en el año 2013.
Culminó estudios universitarios al graduarse como Licenciado
en Ciencias Sociales en la Escuela Superior del Partido “Ñico López”. Su
experiencia como directivo y profesional de la comunicación le valió ser
designado al frente de importantes coberturas informativas por el ICRT, como
los dos primeros congresos del Partido Comunista de Cuba, el vuelo espacial
soviético-cubano y otros eventos nacionales e internacionales. Por varios años
encabezó también el jurado de los Premios Nacionales de Periodismo y por su
trayectoria mereció numerosas condecoraciones, incluida la Llave de Santiago de
Cuba, su tierra natal que siempre llevó con mucho orgullo.
La Radio Rebelde, la emisora de la Revolución, ha tenido a
Antonio Moltó dentro de los equipos de realización de emblemáticos espacios
informativos y de debate de la actualidad, como Haciendo Radio, donde fue
director general, y Hablando claro, por más de veinte años. En ambos se hizo
patente el valor del periodismo comprometido con el pueblo y con la actualidad,
incluso en momentos tan complejos como los años 90 cuando el Período Especial y
las terribles limitaciones económicas que sucedieron a la caída del campo
socialista en Europa del Este y el incremento de la agresividad imperialista
contra la Revolución cubana.
Desde los principios revolucionarios y como protagonista de
primera línea en importantes tareas y desafíos de los periodistas y de la
prensa cubanos en las últimas décadas, Antonio Moltó no escatimó esfuerzos,
incluso a costa de su salud y de su tiempo, para mantener la unidad, la profesionalidad del gremio, su desempeño
ético y la dignificación de nuestro
trabajo.
El cadáver del compañero Moltó será cremado y las honras
fúnebres tendrán lugar mañana miércoles, a partir de las diez de la mañana, en
la sede nacional de la Upec, en 23 e I, Vedado.
La Presidencia de la Upec manifiesta a los familiares,
colegas y amigos, su profundo pesar por el fallecimiento de nuestro querido
compañero Antonio Moltó. Para él no tenemos despedida, sino un enorme abrazo y
un sentido hasta siempre.