Las Tunas-. Ya suman dos las victorias del equipo tunero de
Sofbol de la Prensa a nivel nacional. La superioridad de los representantes de
los medios nacionales con respecto a todos los aspirantes al trono en el Torneo
Jorge Luis Valdés Rionda in Memoriam, hacía que un segundo lugar se convirtiera
en la titularidad para el resto de las novenas en la XIX Edición del evento.
Es por ello que cuando los Leñadores de los medios de
comunicación del Balcón del Oriente Cubano ganaron la semifinal contra los
agramontinos saboraron de muy cerca la victoria, como mismo lo hicieron las
achas del béisbol al vencer al equipo de Industriales en la 57 Serie Nacional.
La práctica de este deporte entre los profesionales de la
palabra más que una competición es un encuentro entre colegas. Periodistas
ubicados en diferentes lugares del país se rencuentran para competir por la
tierra que los vio nacer, amigos que estudiaron juntos, compañeros de siempre
guardan los campeonatos como uno de los recuerdos más hermosos de sus vidas.
Y entre tantas risas, un solo dolor albergaban en su pecho
los actuales subcampeones nacionales: Jorge Pérez Cruz no fungía entre ellos.
«El accidente me sucedió precisamente en Camagüey, cuando me
preparaba para este torneo en juegos de confrontación. Yo quería batear y
aunque los muchachos me dijeron que no lo hiciera, porque estaba funcionando
bien como pitcher abridor, desobedecí.
«Todo iba bajo control pero en la corrida de base me deslicé
en segunda y me partí el peroné. Inmediatamente me operaron y ahora me estoy
recuperando gradualmente.
«Mi estado de ánimo y mi bienestar me confundieron. Me
sentía un niño y eso se lo debo en gran medida a la práctica frecuente de este
deporte que tanto me gusta; pero desgraciadamente ya no lo soy y con sesenta
años un accidente pesa».
La ausencia de Jorge significó un hueco dentro del equipo y
de los corazones de cada uno de los integrantes; porque a pesar de que cada
temporada se incorporan jóvenes que asumen el reto con responsabilidad, la
experiencia de uno de sus principales fundadores, el ánimo depositado en cada
choque y sobre todo los consejos oportunos, dan el toque de magia a la familia
de amigos que componen.
«Cuando la dirección de la Upec me dio el reto de formar un
equipo me costó trabajo lograrlo. En esta provincia existían compañeros con
experiencia en estos eventos ya que habían sido resfuerzos pero Las Tunas no
tenía una célula propia.
«Los primeros integrantes teníamos edad avanzada, recuerdo
que a veces la labor de conscientización se iba más a las familias que a los
propios jugadores, estoy pensando en Oscar Herrera, Julio César, Miguel Díaz
Nápoles, Oscar Cardoso, entre otros.
«El primer torneo que tuvimos fue en Granma. Lucíamos un
uniforme amarillo con unas rallitas bancas y todos nos choteaban con la canción
infantil de «el pollito dice, pío, pío, pío, cuando tienen hambre, cuando tienen
frío» y en esa oportunidad sólo ganamos un juego.
«La pasión fue prendiendo y luego de aquel comienzo sin
mayores alegrías, comenzamos a participar en cada torneo, mejorando nuestras
capacidades como atletas y nuestra calidad de vida, y los resultados se han
visto».
Sus funciones dentro de la novena han sido muchas: fundador,
representante, director, bateador, pitcher; sin embargo la que prefiere, aunque
haya sido la causa de su accidente, es batear y correr las bases.
«A mi me encanta practicar este deporte. Desgraciadamente,
voy a decir desgraciadamente (reitera sonriente), hace ya varios años que
pitcheo.
«Llegué a la lomita de casualidad. En un zonal nacional,
fuimos a representar a Oriente. Dubler Vázquez estaba al frente de la dirección
técnica del equipo y en medio de un apuro se dirigió a mi y me preguntó si me
atrevía a asumir el reto de lanzar. Lo hice, y desde entonces he sido el primer
serpentinero de este equipo.
«Pero confiezo que no es eso lo que me apasiona, me gusta
chocar la bola aunque no sea un excelente bateador».
A este ameno y cordial señor me hubiese encantado conocerlo
activo en medio de un terreno. El hecho de nunca haberlo visto jugar me permite
hoy imaginarlo muy explosivo y dinámico.
El confieza que no demoraré mucho tiempo en corroborar mi
pensar, porque este año, aunque sea con el pie en alto, estará con su equipo en
cada competencia.
Por Adialim López Morales